Cuando un Samurái dice "Esto se hará" es que ya está hecho. No ha de prometer nada, el simple hecho de decirlo es que toma acción.
Un Samurái es Leal a todo el que está a su cargo. Si ha prometido que le cuidará, cumple con su palabra con todas sus consecuencias.
El Samurái sacará el coraje cuando la situación lo requiera. Es inteligente y fuerte. Reemplaza el miedo por el respeto y la precaución.
Un Samurái se ha convertido en un guerrero rápido y fuerte. Por eso le lleva a ayudar a cualquier persona en cualquier momento.
En la batalla el Samurái es respetuoso y bondadoso con su enemigo. Eso lo diferencia de ser un animal o bestia.
Lo que define a un Samurái son las acciones y no las palabras. Él mismo es el juez de su propio honor.
Para un Samurái no existen las "medias tintas", sino lo que es correcto y lo que no. Luchará siempre porque esto se cumpla.